Para ello nos hemos planteado realizar un análisis comparado, a través de la práctica realizada en el Barrio María Elena, un asentamiento organizado ubicado en el Partido de la Matanza; y en los Barrios Ministro Rivadavia en Almirante Brown y Santa Rosa en San Fernando. Todos ubicados en el segundo cordón del AMBA. La investigación aborda la problemática en forma individual y grupal junto a la población. A través de análisis cuantitativos y cualitativos se estudian las necesidades de salud y hábitat, junto a la capacidad de satisfacción de las mismas. Es una experiencia de trabajo interdisciplinario y con la comunidad, que amplia e integra las competencias profesionales de los dispositivos territoriales de salud en relación con el hábitat.
El crecimiento de las ciudades está condicionado a una presión interna con una tensión básica entre la creación de bienestar y sostenibilidad y la conservación del medio. Una vivienda adecuada ayuda al desarrollo social y psicológico de las personas y minimiza las tensiones psicológicas y sociales relacionadas con el ambiente de la vivienda, provee acceso a los centros de trabajo, de educación, a los servicios necesarios, y a los lugares de diversión que fomentan un buen estado de salud. Cuando no existe una adecuada evaluación, manejo y control del riesgo, entonces múltiples condiciones que debieron contribuir al bienestar y la salud del residente se transforman en sus antagonistas.
Belén Borgna, arq
Martín Otero, arq
Ricardo De Francesco, arq
Clara Mansueto, arq
Virginia Pianzola, arq
Verónica Rodríguez, arq
Camila Guzman