Anécdota del día

Nombre: Javier Lozano

Barrio: Almagro

Fecha: 7-10-11

Al manejar mi nave por en la ciudad empecé de a poquito a poco a darme cuenta que la cantidad de sensaciones que causa en el 3ero extraño el fito. Primero que nada, así como el Citroën es el auto pedo (solo al dueño le gusta), el fito es el “auto imputeable”… creo que por mas maniobra extraña que uno se mande, cierre a otros conductores, pase una bocacalle sin frenar, o lo haga zigzagueando… los conductores de los restantes vehículos jamás, de los jamases osan putearte, cuando mucho una mirada medio heavy, pero en el momento en que descubre que vas piloteando una bolita, te miran con esa carita de “ahh mira que lindo”, no se si debe ser por el torbellino de recuerdos. de su primer auto, ternura que el 600 despliega por tu pequeño tamaño y redondeada forma o porque causa, motivo o circunstancia… pero en fin, en todos estos meses que llevo manejando un fito… no he discutido con ningún conductor… ni tampoco me han insultado. Es inexplicable la sensación que causa cuando uno cruza a un niño/a, los cuales te señala a los gritos de “mirá mami, mira el autito”; como dijo un amigo Marcos,(quien tuvo el gusto de tener un fito hasta hace muy poco tiempo y coincidió conmigo frente a la mayoría de estas posturas), “deben pensar que es de juguete”…yo no se Uds. pero a mí la verdad que me hace sentir como si les alegro el día o por lo menos el momento, se imaginan cuando llegan a su casa y le cuenten al abuelo o al padre que vieron un autito simpático y pequeñito...