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FADU UBA - TRABAJO PRACTICO DGPC

En equipos de 4 (cuatro) estudiantes, se darán los primeros pasos en el desarrollo de un rótulo grupal y un rótulo individual, junto a la instancia de ideación y prototipado de la web app del comitente asignado por la cátedra. El rótulo grupal estará acompañado de un archivo con plan de trabajo y otro con el desarrollo del mapa de arquitectura de la información correspondiente a la web app. Todas las páginas deberán ser navegables entre sí y estar vinculadas a una única hoja de estilos. Cada rótulo individual incluirá contenidos diferentes y decisiones estéticas diferentes en otra hoja de estilos individual. Respecto a la web app, se trabajará primero en equipo sobre la idea del MVP y sobre la ficha de ーal menosー un arquetipo de persona perteneciente al público al cual está dirigida. Se deberán generar bocetos y wireframes, terminando con el diseño de ーal menosー 10 (diez) pantallas en formato mobile. De ellas, al menos 5 (cinco) pantallas deben adaptarse a formatos tablet y desktop. Se procurará aprovechar el soporte digital (mobile) como prioridad, simulando tener en cuenta las posibilidades tecnológicas que brinda (acceso a la cámara, GPS, contactos, micrófono, vinculación con otros dispositivos vía bluetooth, etc.).

Capacitamos sobre flora nativa a cooperativistas de la Cuenca

Comenzamos nuevas formaciones que permiten profundizar el conocimiento del paisaje autóctono para optimizar las tareas de mantenimiento y limpieza de la ribera que realizan las cooperativas.

ACUMAR inició las primeras capacitaciones sobre flora nativa destinadas a cooperativistas con el objetivo de que al momento de intervenir el paisaje ribereño tengan herramientas aplicables a la gestión ambiental. La formación, que comenzaron a cursar en junio 60 cooperativistas de Avellaneda y La Matanza, abarca un total de seis encuentros, que incluyen plantación de especies nativas como sen del campo, anacahuita y molle negro. Las capacitaciones continuarán luego en nuevos municipios como Ezeiza, Marcos Paz, Presidente Perón y San Vicente. Las actividades buscan optimizar las tareas de rutina de limpieza y mantenimiento de márgenes que realizan cooperativistas y participantes del programa Potenciar Trabajo y aportar los servicios ecosistémicos que brindan las plantas nativas.

"A partir del aprendizaje de estos nuevos contenidos específicos, buscamos fortalecer las tareas de las cooperativas de limpieza de márgenes. Los actores de la economía social son aliados estratégicos en la gestión ambiental del territorio, por eso, ampliar sus habilidades y destrezas permite reconocer que las tareas que impulsan son empleo verde que aporta al desarrollo sostenible”, destacó la directora de Fortalecimiento Comunitario y Promoción del Desarrollo de ACUMAR, María José Parra.

Las, les y los cooperativistas, que en su mayoría viven en sus zonas de trabajo, se convierten así en difusores locales de la importancia de las especies autóctonas y contribuyen a la restauración del Camino de Sirga. Asimismo, a partir del aprendizaje de estos nuevos contenidos específicos, podrán intervenir en forma más idónea en la recomposición del ambiente.

Veronica Passi, responsable de la Cooperativa Los Pinos aseguró: “El espacio está mucho mejor que antes, mejoramos mucho esta zona y además las compañeras y compañeros agradecen la posibilidad de aprender estos saberes y poder transmitirlos al barrio”.

Cada curso incluye encuentros teóricos, prácticos y una instancia de evaluación para acreditar los conocimientos adquiridos y la habilidad de dar solución a las posibles problemáticas del paisaje que puedan surgir en el transcurso de las tareas habituales. Sus contenidos abarcan conceptos vinculados a paisaje, flora y ecosistemas y profundizan sobre la importancia de cuidar el ambiente y su biodiversidad, así como la posibilidad del disfrute del paisaje autóctono.

Reunión inaugural del Gabinete Ambiental de Obras Públicas

Junto a referentes del Ministerio, sus organismos, entes y empresas, ACUMAR participó del encuentro que tuvo como objetivo presentar la Agenda Ambiental 2022 -2023 para incorporar esta perspectiva de manera integral en la gestión de la Obra Pública.

El Gabinete Ambiental es un nuevo espacio de articulación del Ministerio de Obras Públicas de la Nación que se propone ejecutar una Agenda Ambiental a través de tres líneas de acción: infraestructura sostenible; adaptación y mitigación del cambio climático; y fortalecimiento institucional para una gestión sostenible de la obra pública. Lo componen representantes de las áreas del ministerio, sus organismos descentralizados, entes y empresas. Encabezaron la primera reunión el ministro Gabriel Katopodis, y la secretaria de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, Cecilia Nicolini.

“Celebramos la conformación de nuevas instancias de articulación institucional que permitan profundizar la ambientalización de las políticas públicas en todo el país y, en particular, en nuestra Cuenca Matanza Riachuelo”, destacó el director general de Gestión Política y Social, Antolín Magallanes, quien asistió al encuentro en representación de ACUMAR.

Durante la jornada se trabajó en la Agenda Ambiental 2022-2023, que buscará asegurar el cumplimiento de compromisos y normativas ambientales locales e internacionales a través de intervenciones con perspectiva ambiental y de desarrollo sostenible, e incorpora la variable de cambio climático para fortalecer la sostenibilidad de la infraestructura pública y de los recursos hídricos en el territorio nacional.

Al respecto Katopodis expresó: “La conformación del Gabinete Ambiental nos permitirá fortalecer y avanzar en una intervención inteligente en los procesos”. Y agregó: “Tener una perspectiva ambiental es fundamental para hacer más y mejor obra pública, con un Estado presente”.

El Ministerio de Obras Públicas intervino en 2.840 obras y 445 proyectos con perspectiva y/o incidencia ambiental, que representan el 55,6% de obras y proyectos, y el 40% de la inversión plurianual del Ministerio.

Capacitamos sobre flora nativa a cooperativistas de la Cuenca

Comenzamos nuevas formaciones que permiten profundizar el conocimiento del paisaje autóctono para optimizar las tareas de mantenimiento y limpieza de la ribera que realizan las cooperativas.

ACUMAR inició las primeras capacitaciones sobre flora nativa destinadas a cooperativistas con el objetivo de que al momento de intervenir el paisaje ribereño tengan herramientas aplicables a la gestión ambiental. La formación, que comenzaron a cursar en junio 60 cooperativistas de Avellaneda y La Matanza, abarca un total de seis encuentros, que incluyen plantación de especies nativas como sen del campo, anacahuita y molle negro. Las capacitaciones continuarán luego en nuevos municipios como Ezeiza, Marcos Paz, Presidente Perón y San Vicente. Las actividades buscan optimizar las tareas de rutina de limpieza y mantenimiento de márgenes que realizan cooperativistas y participantes del programa Potenciar Trabajo y aportar los servicios ecosistémicos que brindan las plantas nativas.

"A partir del aprendizaje de estos nuevos contenidos específicos, buscamos fortalecer las tareas de las cooperativas de limpieza de márgenes. Los actores de la economía social son aliados estratégicos en la gestión ambiental del territorio, por eso, ampliar sus habilidades y destrezas permite reconocer que las tareas que impulsan son empleo verde que aporta al desarrollo sostenible”, destacó la directora de Fortalecimiento Comunitario y Promoción del Desarrollo de ACUMAR, María José Parra.

Las, les y los cooperativistas, que en su mayoría viven en sus zonas de trabajo, se convierten así en difusores locales de la importancia de las especies autóctonas y contribuyen a la restauración del Camino de Sirga. Asimismo, a partir del aprendizaje de estos nuevos contenidos específicos, podrán intervenir en forma más idónea en la recomposición del ambiente.

Veronica Passi, responsable de la Cooperativa Los Pinos aseguró: “El espacio está mucho mejor que antes, mejoramos mucho esta zona y además las compañeras y compañeros agradecen la posibilidad de aprender estos saberes y poder transmitirlos al barrio”.

Cada curso incluye encuentros teóricos, prácticos y una instancia de evaluación para acreditar los conocimientos adquiridos y la habilidad de dar solución a las posibles problemáticas del paisaje que puedan surgir en el transcurso de las tareas habituales. Sus contenidos abarcan conceptos vinculados a paisaje, flora y ecosistemas y profundizan sobre la importancia de cuidar el ambiente y su biodiversidad, así como la posibilidad del disfrute del paisaje autóctono.