Familia

Antes de los cambios sociales que se dieron en el siglo XX, la función de la mujer en la sociedad era ser madre, pero las cosas han cambiado y hoy ya no es fundamental.
Históricamente, en nuestra sociedad patriarcal, era el hombre el que llevaba sustento a la casa, y la mujer tenía hijos y los cuidaba. Este canon llegó a ser tan fuerte que a la mujer no se le permitía nada más que eso, y salir a trabajar o querer desarrollarse en un nivel personal, laboral o intelectual era imposible. El hombre por su parte, no podía ser un buen padre, pues no era bien visto que se preocupara por sus hijos, para eso estaba la mujer.

La maternidad y el hogar se constituyeron como el lugar mítico de definición de lo femenino. En el siglo XIX el modelo de la familia burguesa, núcleo vincular que resguardaba la cohesión y perdurabilidad del patrimonio, y asimismo de los valores cívicos y morales, se consolidó como célula básica del sostén del estado. Sin embargo, este modelo, que permaneció ajeno a las transformaciones históricas, estuvo y está lejos de representar todas las realidades sociales.

Según expone Sastre, la familia encuentra su origen en el matrimonio, consta de esposo, esposa, reproducción de una sociedad, esto es, la incorporación de nuevos miembros en el tejido de relaciones sociales, no se realiza únicamente por medios biológicos.