Porqué ayudar


Toda persona tiene derecho a la salud, a la alimentación, a la educación, al trabajo y la vivienda digna; si una persona es despojada de cualquiera de estos derechos básicos, su dignidad se ve ultrajada, simplemente porque no puede ejercer su libertad. Hay muchas familias en situación crítica de extrema pobreza, personas sin techo propio y, por lo tanto, sin aspiraciones, sin ilusiones, sin confianza; pero si nos unimos y trabajamos solidariamente, podemos revertir esa injusticia y permitirles mirar hacia el futuro con esperanza. Ayudar, Ladrillo por Ladrillo, a que cada familia necesitada pueda acceder a su techo propio es ayudar a cambiar la sociedad. Tu aporte, por pequeño que sea, es muy valioso porque con tu ayuda estarás contribuyendo no sólo a combatir la pobreza de hoy sino a que las próximas generaciones tenga un futuro mejor.