Lionel Messi sin lugar a dudas es un jugador de fútbol excepcional. El propio Diego Maradona habla de él como su sucesor... sí, tiene la mala suerte de ser argentino y que Maradona haya nacido antes que él, por lo tanto siempre será comparado. Pero, seguramente ahora, cuando un argentino esté en cualquier lugar del mundo, sin saber cómo comunicarse, el primer esbozo de comunicación será: "¿Algentino? ¿Messi? ¿Maradona?" o "¿Aryentino? ¿Messi? ¿Maradona?". De todos modos, según cronistas deportivos, jugadores e hinchas de todo el mundo, Lionel es considerado el mejor jugador del mundo, razón por la cual ha recibido el Balón de Oro y el premio al Mejor Jugador del Mundo de la FIFA, a sus 21 y 22 años.
Primeros años
Antes de ser mundialmente famoso, su historia fue un tanto problemática. En 1995, Messi comenzó a entrenarse en las divisiones inferiores de Newell's Old Boys, club con el que obtuvo la Copa de la Amistad de Perú en 1997. A los 11 años, le fue diagnosticada una deficiencia de la hormona de crecimiento. River Plate mostró su interés en el progreso de Messi, pero no contaba con el suficiente dinero como para pagar el tratamiento, que tenía un precio de u$s 900 por mes. Carles Rexach, director técnico del Barcelona, notó el talento de Messi y Lío viajó junto a su padre, fichando para el Barça que se ofreció a pagar los costosos tratamientos si él se mudaba a España. Entonces, su familia se trasladó a Europa donde comenzó a jugar con equipos juveniles.