La Revolución de Mayo no puede ser definida como un hecho en particular, sino que es un conjunto de eventos que tuvieron lugar en Mayo de 1810 en el Virreinato del Río de la Plata, lo que sería hoy Buenos Aires. Estos eventos tuvieron como consecuencia la formación del primer Gobierno independiente de la metrópoli española, Gobierno que luego le heredaría el nombre de Argentina; los sucesos que se desarrollaron aquí se agrupan en la ya conocida Semana de Mayo, los mismos empezaron el 18 de Mayo de 1810 y terminaron el 25 de Mayo del mismo año con la proclamación de la Revolución. Con la llegada de la fragata Inglesa a Montevideo, se confirmaban los rumores de que España estaba en apuros; Napoleón Bonaparte la había invadido apresando a su rey Fernando VII quien sería reemplazado por el mismísimo hermano de Napoleón, José Bonaparte. Estos acontecimientos le daban a saber a Buenos Aires que el poder de la corona se había trasladado a Cádiz, más precisamente al Consejo de la Regencia en donde ya se encontraban las tropas francesas. Este evento fue el primero y el que se encargó de desencadenar los siguientes sucesos que formarían la ya conocida Semana de Mayo y su posterior Revolución. Para los nativos del Virreinato del Río de la Plata todo estaba más que claro, si la autoridad del Rey ya no era tal, entonces el poder estaba vacante y la región en plena acefalía. La noticia de la captura del Rey se dio a conocer días más tarde ya que las autoridades españolas en el Virreinato no deseaban un levantamiento popular; pero cuando esto ocurrió, un grupo constituido por Juan José Castelli, Manuel Belgrano, Nicolás Rodríguez Peña, Juan José Paso y Antonio Luis Beruti sostuvieron una reunión el 18 de Mayo en donde se le planteaba al representante de la Corona española la necesidad de organizar un Cabildo abierto, el cual se realizaría el 22 del mismo mes.

La Revolución de Mayo estaba cerca, los cabildantes manifestaban el deseo de independizarse de la madre patria y crear una nueva nación; otro sector en cambio, señalaba la necesidad de continuar bajo el mando de los españoles y esperar otras novedades provenientes del viejo continente, esto se debía en gran parte a la protección de sus bienes económicos.

Aunque Baltasar Hidalgo de Cisneros, Virrey actual, no deseaba renunciar, tuvo que hacerlo y se sucedió así la formación de la Junta sucediendo así La Revolución de Mayo; la Junta se formó el 25 del corriente mes y buscaba el objetivo de libertad para la que luego sería Argentina, esto recién sucedió 6 años más tarde, el 9 de Julio de 1816. Pero la Revolución de Mayo también tuvo otras causas, entre ellas el desorden económico, existía un gran descontento de los habitantes debido a que se favorecían las exportaciones a España y no se atendía el mercado local. La Monarquía empezó a debilitarse y a perder prestigio, mientras que en el Virreinato existía una gran rivalidad entre los criollos y peninsulares, en gran parte esta rivalidad crecía porque eran cada vez más los españoles que decidían emigrar hacia la metrópoli y los criollos entendían que ése era su lugar. Las invasiones inglesas también influyeron en la Revolución de Mayo, cuando los británicos trataron de tomar Buenos Aires, tuvieron que ser rechazados por sus habitantes debido a la incapacidad que el Gobierno de Carlos IV mostró hacia los invasores, dejando a la metrópoli indefensa.